La vida que explota
Curaduría Andrei Fernández
22 Sep al 2 Mar, 2025
La vida que explota propone un diálogo entre el conjunto escultórico de cinco seres antropomorfizados que Gabriel Chaile presentó en la Bienal de Venecia en 2022, expuestos ahora de modo permanente en MALBA—PUERTOS, y las obras textiles de la artista wichi Claudia Alarcón y el colectivo de tejedoras Silät.
Las criaturas totémicas de Chaile llevan los nombres de los miembros de su familia y son el resultado de un proceso de mutación que comienza con la fascinación por el poder de la imagen y la sugestión del lenguaje estatuario. Chaile recupera sus orígenes en la forma de esculturas monumentales de barro, artefactos que también pueden ser encendidos, dar calor y funcionar como hornos que producen alimentos.
En diálogo con estas esculturas, se presentan aquí piezas de arte textil de la artista salteña Claudia Alarcón y del colectivo de tejedoras Silät, que reúne a mujeres wichis que luchan por la defensa de la memoria colectiva y la creatividad de su cultura. Estas artistas trabajan el hilado de chaguar –una planta herbácea con hojas suculentas y espinosas, distintiva del Gran Chaco– con imágenes contemporáneas y complejos ensamblajes geométricos. Los textiles de chaguar hace mucho circulan en las ciudades en forma de bolsas, llamadas yicas, y en estos últimos años han crecido para ser grandes paños pensados para la contemplación y ya no para el uso.
Las piezas textiles enlazan diseños del lenguaje visual del pueblo wichi, que se interrumpen y resignifican con explosiones que son pronunciamientos de fuerza y de alegría que crecen. Ocupan el espacio de una forma nueva, para alcanzar lo que fue antes arrebatado como destino. Junto a las criaturas de Chaile, proponen recuperar personajes e historias que desobedecen a las negaciones de la memoria que impone la colonialidad.